jueves, 13 de octubre de 2011

Historia de Madrid. El Madrid cristiano. Reconquista y Edad Media.








La reconquista cristiana de Madrid tiene lugar en el año 1083 y es cuando se descubre la imagen de una virgen escondida en la muralla de la al-mudyana. Alfonso VI reconquista Mayrit en el 1083 tras los intentos de Ramiro II en el 932, derriba parte de la muralla reconstruida por Abderramán III, y en el 950.

Puede que Abderramán III en vez de reconstruir la primera muralla árabe construyera una segunda que es la que se cita en el siglo XIII ya como la primera muralla cristiana mandada levantar por Alfonso VI tras la reconquista. El motivo de esta segunda muralla ya sea cristiana o musulmana era la protección la Medina, de los extramuros contiguas a la al-mudayna.
                   
Puede que tras la reconquista se levanta una muralla rehecha sobre la segunda musulmana de Abderramán III.


Las últimas excavaciones parecen indicar que esta segunda muralla es de construcción cristiana pues tras la caída de Madrid se destruyen las construcciones árabes. Los cristianos levantan una muralla defensiva a fines del siglo XI o comienzos del XII. Es así que tenemos una primera muralla árabe y una segunda levantada tras la toma de Madrid por Alfonso VI y que engloba la población cristiana que ha ido creciendo extramuros tras la reconquista. La anchura de esta segunda muralla era de casi 3,5 metros.


Hay que decir que la construcción de la segunda muralla no supone el derribo de la primera. La muralla de la Al-mudyna con sus puertas y portillos de acceso coexiste con la muralla de la Medina que contaba igualmente con sus puertas y portillos.






Hay varias tradiciones sobre la historia de la Virgen de la Almudena. Una nos cuenta que tras la conquista de Madrid por el rey Alfonso VI, en noviembre de 1085, comenzó la búsqueda de la imagen de la Virgen que, casi cuatrocientos años antes, en el año 712, había escondido un herrero para evitar que los musulmanes la profanaran a su entrada en Madrid. Aunque nadie lo había olvidado, porque sabían de su existencia por los antepasados, se ignoraba el lugar exacto donde permanecía oculta. Después de nueve días de constantes plegarias, un cubo de la muralla se resquebrajó dejando al descubierto la imagen de la Virgen y dos cirios que la habían alumbrado durante los 373 años que había permanecido escondida. La imagen fue trasladada hasta la parroquia de Santa María, que fue demolida en 1868 para ampliar la calle Bailén.
Desde entonces se llamó la Virgen de la Almudena, en recuerdo de la al-mudayna, en la que fue encontrada.


Una leyenda cuenta también que una mañana que el Cid había salido de Toledo en dirección a Madrid, en compañía de algunos caballeros, se encontró por el camino con un leproso que se había caído en una zanja y pedía ayuda. Cuando el Cid sacó al leproso de la zanja, observó cómo éste se convertía en una figura femenina, que resultó ser la Virgen de la Almudena. Ésta le comunicó que tomaría Madrid y que incluso ganaría batallas después de muerto. La Virgen, después de indicarle por dónde debía entrar en Madrid, despareció. El Cid, al regresar junto a los caballeros comprobó cómo éstos se desperezaban de un profundo sueño en el que misteriosamente habían caído ajenos a la aparición de la Virgen. De regreso a Toledo, esa misma noche, el Cid salió de nuevo hacia Madrid acompañado de sus caballeros. Se apostaron en el lugar indicado, frente a la muralla, y, de pronto, observaron con asombro cómo uno de los cubos se abría. El Cid y sus tropas entraron en la ciudad tomándola por sorpresa. En el cubo roto apareció milagrosamente la imagen de la Virgen de la Almudena.

Cuando en 1707 se derribó el llamado cubo de la Virgen, se acordó colocar una imagen de piedra en su lugar, de recuerdo. La imagen que ahora podemos ver en la Cuesta de la Vega es de 1941. En el lugar donde podemos ver la imágen de la Virgen se localizaba la Puerta de la Vega.






El nombre de Almudena también se explica por haber sido hallada la imagen de la Virgen en la muralla junto al almudí o alhóndiga, el depósito de trigo situado en el recinto murado de la al-Mudayna.


Pero, ¿cómo puede esconderse la imagen en la muralla cuando la invasión árabe si la muralla fue levantada precisamente por estos a fines del siglo IX?.


Los almorávides en el 1110 y los almohades en el 1197 intentan la toma de Madrid. Los almohades acampan en las colinas del Alcázar, terrenos conocidos ahora como El Campo del Moro. Desde el año 1142 se habla ya del alcázar de Madrid para referirse al asentamiento militar árabe recientemente recuperado por los cristianos. 


En el año 1126 se había fundado por Alfonso VII el primer monasterio bajo la advocación de San Martín de Tours con monjes procedentes del convento de Santo Domingo de Silos en un arrabal situado frente al recinto militar. Nace el arrabal de San Martin.



En el año 1202 Alfonso VIII dio su primer Fuero a Madrid. El Fuero de Madrid 


fue redactado por el Concejo con el consentimiento del rey, y en él se fijaba por 


escrito el derecho local que debía regular la vida en la Villa.

 

El fuero estuvo vigente hasta el año 1346. El concejo abierto de la villa se reunía 


dos o tres veces por semana en un corral de la parroquia de San Salvador, 


situada frente a la actual plaza de La Villa y antes plaza de San Salvador. 


Desaparece este corral en tiempos de Enrique IV y las reuniones del concejo 


pasan a una sala situada encima del atrio de la parroquia. Derribada por 


ruinosa esta iglesia parroquial en el año 1848.

 


Participa el concejo de Madrid en la batalla de las 


Navas de Tolosa en 1212 frente a los almohades y ya 


portan la bandera con el oso y el madroño.




En sus orígenes fue San Salvador una iglesia dedicada a Santa María Magdalena. El primer dato que tenemos sobre su existencia es el Fuero de 1202, en donde ya aparece como parroquia de El Salvador. Situada en la calle Mayor frente a la plazuela de la Villa, se trataba de un edificio pequeño al que se accedía por una discreta portada sobre la que había un nicho con la estatua de El Salvador realizada en piedra. Tanto la torre, como las campanas y el reloj de la parroquia pertenecían al Ayuntamiento. En cuanto a la torre, de una gran altura, era conocida como la «atalaya de la Villa», para diferenciarla de la torre de la parroquia de Santa Cruz, también propiedad de la Villa y conocida como la «atalaya de la Corte». El concejo de Madrid durante los siglos XIV y XV celebraba sus reuniones en una pequeña sala capitular situada encima del pórtico de la iglesia. Era en esta parroquia donde celebraba sus ceremonias religiosas. Todos los miércoles de cuaresma el Concejo debía acudir a El Salvador a escuchar un sermón especialmente preparado para él. Debido a su cercanía, la parroquia del Salvador también estuvo muy vinculada al gremio de plateros ya que desde aquí a la Plaza Mayor estaban los soportales con los talleres de estos artesanos y este tramo de la calle Mayor se llamaba de Platerías. Estuvo aquí enterrado Calderón de la Barca que vivía en la calle mayor. Como recuerdo de ello la calle Calderón de la Barca que ocupa parte de lo que fue el terreno de la Parroquia.


En 1559 se derriba el atrio del Salvador y con él el salón del 


Ayuntamiento. El motivo fue el ensanche que hubo de 


realizarse en la calle Mayor para dar paso a la comitiva de 


recibimiento de la reina doña Margarita, esposa de Felipe 


III. Se hace preciso entonces disponer de otro local.


Se compran unas casas allí mismo, en la plaza de la Villa, que pertenecían a Juan de Acuña, marqués del Valle de Cerrato en Palencia de la casa de los condes de Buendía en Cuenca, donde se empieza a edificar la Casa de la Villa, obras que no terminarían hasta 1696.




Uno de los escudos más antiguo de Madrid se encuentra en la esquina de la calle de Segovia con la de los Caños Viejos en lo que queda de lo que fue la llamada Casa del Pastor. En esta casa se celebraron durante algún tiempo las reuniones del ayuntamiento de Madrid hasta que se construyen sus casas en la plaza de la Villa tras el derribo de la sala de la parroquia de San Salvador.



En las arcadas de la Casa de la Panadería de la Plaza Mayor podemos ver interesantes escudo de la villa de Madrid.

Alfonso XI, en el año 1346, sustituye el concejo abierto por un "regimiento" encargado de tratar los asuntos comunales. Nace así el Ayuntamiento de Madrid, de cuyas reuniones se conservan actas escritas desde 1464.


Por el este de la Al-mudayna fueron surgiendo arrabales desde el siglo X y el área habitada, la Medina, desbordó la primera muralla. Está documentado el arrabal de la Axerquía, La Sagra, y por el sur el del cerro de las Vistillas. Tras la reconquista cristiana la población de Madrid continua creciendo y surgen nuevos arrabales. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario